¡HAAAAA, LA NAVIDAD! Y LAS FIESTAS DECEMBRINAS CLARO.

Esta mañana he estado checando calmadamente los periódicos para saber que fue lo que nos trajo esta navidad, este fin de año y por supuesto el año nuevo.

¡sorpresa!, en el análisis podemos observar un aumento del 300 por ciento en los accidentes asociados al consumo de alcohol a lo pendejo, cifra que sólo se ve en esta época del año y en las pedas patrias de septiembre, lastima por aquellos que perdieron a un ser querido en las manos de algún borracho pendejo.




Aumentos en los insumos, no importa cual sea su denominación o como les quieran poner, para empezar un cartón de cerveza que hasta mediados de diciembre les costó 115 pesos en un deposito, ahora les costará 145 pesos, los cigarros les costarán dos pesos más por cajetilla en promedio, algunos diran “ que bueno, a ver si asì dejan de fumar y tomar pinches viciosos”.

A esas personas yo les diría ¿y los que consumen gas?, ¿ y el 5 por ciento a las gasolinas?, ¿y el costo en le precio de las tarifas telefónicas?, ¿y el alza en el precio de las tortillas? que en muchos lugares ya las pusieron a 9 o 10 pesos, ahora que les informo que el precio de la carne ya esta en un 4 por ciento más cara.

Y por supuesto no podían faltar un chingo de mocosos quemados por los fuegos pirotécnicos que son usados sin responsabilidad y la supervisión de un adulto, claro son cotar a los otros chamacos que se quemaron en las clásicas y de mal gusto fogatas navideñas que se hacen en León, donde una bola de incultos que a media calle prenden fuego a lo que sea, y generan un fin de año con 5 días de precontingencias ambientales graves.

Pero no se apuren, al fin y al cabo el calentamiento global nos matará antes de que podamos corregir el rumbo, no se apuren, sigan con sus festejos evasores de la realidad.

Por cierto el arzobispo de León José Guadalupe Martín Rabago ya pidió el diezmo y aseguró que este es “una obligación y no un compromiso de los católicos” y por si eso no fuera poco les puso fecha límite para entregarlo, algo así como para el 30 de abril a más tardar, es como el cobro por un secuestro express de la fe.

A mi consideración estos señores encargados de difundir la fe, y uno que otro temor sin sentido, y algunas ideas retrogradas, deberían ponerse a trabajar en lugar dedicarse a estirar la mano y pedir, tomen en cuenta que sus fieles tiene muchas cosas que pagar, y su aumento de sueldo será de un anémico y raquítico 4 por ciento, el cual deberá ser utilizado para comida, vivienda, transporte, medicamentos, utensilios, ropa, calzado, cosas que seguramente ustedes no saben que son caras y difíciles de conseguir, ¡no! Que va, si nunca han comprado con su dinero, su fieles les pagan hasta las tenencias de sus lujosos carros, ¿Qué bien les ha salido el negocio que iniciaron con un burro y un pesebre?... ¡pónganse a trabajar!