Hubo una llamada

Algún miembro del otro lado, una oreja que deserta en conciencia y avisa que la vigilancia está con todo. Es bueno sentirse con guardespaldas y pagado por el otro, el que tiene cola pone cola, es simple. Y es que nosotros ya no le íbamos a hacer a eso, pero hay cosas que encabronan hasta al más ignorante ermitaño. Ta'güeno. Chido. Para que no digan que no violentan libertades.