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¡Éntrale a la paranoia!

viernes, 14 de diciembre de 2007

¿YA ESTÁN ESPERANDO LA NAVIDAD?

No se si ya han meditado ¿lo que realmente representa la navidad?, hay miles de teorías, unos dicen que es el celebrar el natalicio del niño Jesús, claro esa es una buena tesis con un gran contendido comercial “¡caite con tu diezmo!”.



Otros dicen que es la época en la que se reúne la familia, y que el la época de perdonar, ¡aja como no!, cosa es de que se avienten dos que tres chupes y los pleitos comienzan, y hay de aquel que trate de interponerse entre el o las valientes que decidan romperse la boca, a eso les toca más por metiches, y el pleito se hace más grande, pero no se apuren, ya vendrá la otra “navida”, ahí se arreglan con sidra y una rica cena… ¡viva la familia!

Sin embargo, no puedo dejar de pensar en que San Nicolás, mejor conocido por la gente bien y bonita como “Santaaaaaa”, este personaje tan gringamente metido en nuestras mentes que quieren dejar de ser “nacas” no es solamente un viejo ridículo y mamón, ¡no!, es un grupo de comerciantes manipuladores que lo ven como la minita de oro para que las personas que reciben aguinaldo se lo gasten a lo pendejo e inicien el mes de enero jodidos y pidiendo prestado, y así pues reactivamos la economía.



En los lugares donde he estado por cuestiones laborales, accidentales, casuales, hormonales y hasta coyunturales, he sido muy criticado en el momento en el que algún “alma bondadosa” se acerca a decirme “vamos a hacer un intercambio para festejar la navidad, ¿gustas entrarle?” y como siempre y cada año, desde que esto dejó de ser obligatorio en mi vida, digo ¡no!, no es extraño que me pongan cara de asombro y me pregunten ¿ hay y por que no?, y la respuesta siempre ha sido la misma “ no me agradan esas costumbres, gracias”.

Sin embargo el ser humano promedio es tan pinche necio que no sabe entender cuando se encuentra con un razonamiento lógico, y entonces viene la parte en la que insisten “ándale, va a ser baratito” y es cuando un poco encabronado tengo que recurrir los argumentos igual de lógicos, pero que a muchos les suenan violentos: “¡no me agrada, es ridículo que le regale a una persona que no es mi amigo(a), o que no me simpatiza, o que no conozco!”

Después de un silencio, vuelve a chingar la borrega “pero en el papelito puedes poner las opciones de lo que quieres que te regalen”, ya más encabronado por la tercera insistencia, tengo que llegar al punto la que la mayoría le dice ser grosero. ¡NO! No me interesa, si alguien es de mis estimas o yo de las suyas, sabe y se lo que y le gusta, no se lo tengo que decir, ni el a mi, ahora que si tengo dinero para comprar algo, me lo compro yo, no se lo pido a otro, y así me compro lo que se me de mi chingada gana a mi gusto y lo mismo pasa con el otro ser humano, ¿ quedó claro?

En el nivel tres, la mayoría dejan de insistir, sin embargo me he topado con quienes insisten una cuarta vez, “¿y por que no te gusta?”, pues te lo pondré claro, cuando fui a la secundaria, todos se daban cuenta que me gusta leer, y entonces un pendejo me regaló el libro juventud en éxtasis por que le pareció “que me podría ayudar” y entones pregunto ¿ no te parece que ese tipo es un pobre pendejo?

Cuando ya he llegado a este desagradable punto, por lo regular lo que atinan a decir es: “ ¡ya esta bien, no entres luzbel, Grinch, amargado!”. Y he aquí lo que realmente significa que te regalen algo por que es navidad y hay que comprar, y por que si, por que hay que regalar. Este tipo de acciones no hablan más que de un grupo de comerciantes usando un traje de San Nicolas y con sus intenciones un poco ocultas para que compres y evites sentir la condena social en tus ya de por si cansados hombros.



Pero no solo son los seres humanos los que sufren los estragos de la navidad, también algunos regalos llegan a sufrir y de horrenda forma. Como todos lo saben yo soy una amante de los animales, claro sin llegar a casos de zoofilia, es por eso que en este escrito no puedo dejar de hablar de esas víctimas que no pueden hablar y a las cuales desgraciadamente la ley estatal de protección a los animales del estado de Guanajuato no protege.

A todos los niños les encantan las mascotas, pero hay un sector que denomino de padres mal educados y anti vida, estos chiquillos en especial nunca son orientados y creen que son como los juguetes que cuando te aburren los echas en una caja, o a la basura y punto fin del problema.

Tan sólo en el estado de Guanajuato cada año durante los meses de enero y febrero se sacrifican 300 por ciento más de perros que el resto del año, expertos veterinarios aseguran que esto se debe al gran número de regalos que llegaron en navidad, incluso doctores como Octavio Serna ha sido victima del espíritu navideño, para él ya es común que cada inicio de año le dejen un perro amarrado en la reja de su clínica, incluso hay quienes le han dejado un recado diciéndole “ se lo traje a usted por que yo ya no puedo cuidarlo”.

Y es que esta poca madre tener una mascota, “los perros chiquitos son como de peluche” comenta la gente, pero claro al pobre animal lo dejan hacer lo que le de su chingada gana en la casa, romper de todo, y mearse donde sea, claro , “por que esta chiquito” y cuando lo quieren educar, pues el perro ya no se deja, por que aprendió mal desde un principio, y con el crecimiento se le vienen los problemas, “ se puso bien feo, se caga y mea en donde sea y deja bien apestosa la casa, me rompió los zapatos, se sube a los sillones, traga aun montón, sale bien caro llevarlo al veterinario, nadamas se la pasa cagando” y entonces el padre de familia ya molesto por que le deja lleno de pelos y “miados” el sillón donde reposa las lonjas cuando ve futbol toma una determinación: “ vamos a tirar ese pinche perro” y así nada más ahí va otro regalo victima de la navidad.



Lo bueno es que hay quien pide por los demás, hay quien le reza mucho a la virgen, y le piden mucho a Dios, se la pasan pensando en ángeles y serafines, sayayines y pitufos, bueno, realmente no le piden a su deidad, en realidad la ocupan como un instrumento para aterrar a sus seguidores y sacarles una lana y de esa manera mantenerse como el estado más rico del mundo, pero el que menos suelta prenda para los más jodidos.

Así que me pregunto ¿qué cara pondrán esos altos jerarcas cuando ven a estas vírgenes de la desnutrición en las calles mientras ellos comen como reyes y viajan como ricos?




¡Así que feliz navidad mis queridas victimas de la mercadotecnia!


¡JO JO JO JO JOP JO JO JO JO JO JO!
















1 comentario:

MVZ Heidi dijo...

Tienes mucha razón, el consumismo esta terrible a final de septiembre las tiendas ya están repletas de artículos "navideños" que se convierten en toneladas de basura y en efecto es muy triste que las pobres mascotas sin deberla ni temerla sufran del calor navideño es de dar coraje....... y por cierto yo también estoy en contra de los intercambios como se dice regale amor no lo compre

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